España es conocida por tener un clima mediterráneo con veranos muy calurosos, pero gracias a que cuenta con una gran diversidad climática, podemos encontrar  destinos menos calurosos en diferentes regiones del país y poder disfrutar así, de temperaturas más suaves.

Algunos de estos destinos a los que puedes escaparte para darle un respiro al calor son:

San Sebastián. Ubicada en el País Vasco, San Sebastián tiene un clima oceánico moderado. Las temperaturas suelen ser suaves durante todo el año, con veranos frescos e inviernos suaves. Una fantástica elección para escaparte unos días y huir de los días más calurosos del verano.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Santiago de Compostela. Situada en Galicia, en el noreste de España, Santiago de Compostela cuenta con un clima atlántico. Los veranos son templados, con una temperatura media anual más baja que en otras partes del país. Las temperaturas en verano no superan los 22 grados de media.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Oviedo. Una ciudad de la región de Asturias, Oviedo goza de un clima suave y templado debido a su ubicación en el norte de España. Los veranos son frescos, con temperaturas máximas que oscilan alrededor de los 23 grados.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

La Coruña. En la costa norte de Galicia, La Coruña también goza de un clima atlántico templado. Las temperaturas no suelen ser extremas, permitiendo disfrutar de los veranos más suaves del país, perfectos para los que no pueden soportar las temperaturas extremas de otras regiones de España.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Santander. Situada en Cantabria, en la costa norte, Santander cuenta con un clima oceánico. Los veranos son frescos, con brisas marinas que ayudan a mantener unas temperaturas muy agradables.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Estos destinos del norte de España ofrecen una alternativa más fresca a las altas temperaturas del sur y el centro del país durante los meses de verano. Sin embargo, es importante tener en cuenta que el clima puede variar y las condiciones meteorológicas pueden cambiar, por lo que es recomendable consultar los pronósticos locales antes de planificar cualquier viaje. Aunque muchas veces, en estos destinos, los cambios temporales son impredecibles.